Declaración de Costa Rica sobre el abordaje multidisciplinar del paro cardiaco súbito y la muerte súbita cardíaca

Cada año se producen 4-5 millones de muertes súbitas cardíacas (MSC) en todo el mundo lo que representa del 15 al 20% de la mortalidad global lo que resulta en una enorme carga de muerte prematura por encima del cáncer, tanto en hombres como mujeres en todos los grupos etarios. La MSC representa un 50% de todas las muertes cardíacas y en la mitad de las personas, el paro cardiaco súbito (PCS) suele ser la primera manifestación de una enfermedad cardiovascular que debuta de forma inesperada y sin previo aviso. La supervivencia después de un PCS presenta diferencias de hasta 10 veces dependiendo de la localización geográfica y es inferior al 10% en muchas partes del mundo, situación que se considera inaceptable.

Por todo ello, la PCS/MSC se ha convertido en un reto global debido a su alta incidencia, su impacto desde el punto de vista sanitario, social y económico y la tragedia que representa para las familias afectadas.

Para tratar este reto global, entre los días 26 y 28 de septiembre de 2024 se celebró el Simposio Internacional de Muerte Súbita Cardiaca bajo el lema “La perspectiva centroamericana hacia un reto global” que tuvo en el Hotel Marriott Hacienda Belén de Heredia (Costa Rica). Este evento científico reunió a 250 participantes entre médicos de diferentes especialidades (cardiólogos, patólogos forenses y clínicos, electrofisiólogos, genetistas, imagenólogos, médicos de familia, urgenciólogos y especialistas en medicina del deporte), técnicos, estudiantes, enfermería y farmacólogos procedentes de 30 países, tanto de Europa, USA, Canadá, Centro y Sudamérica.  

En un intenso trabajo, en los diferentes paneles se trataron los siguientes temas:

  • Definición, codificación y registro de la muerte súbita
  • Atención primaria a los pacientes con riesgo de muerte súbita
  • La electrofisiología cardiaca en la estratificación del riesgo y prevención de la muerte súbita
  • Muerte súbita y deporte
  • Muerte súbita en insuficiencia cardíaca y cardiopatía isquémica
  • Miocardiopatía arritmogénica y miocarditis
  • Canalopatías
  • Miocardiopatía dilatada
  • Miocardiopatía hipertrófica
  • Presente y futuro de la autopsia en la investigación de la muerte súbita
  • Taller práctico de “corazones en la mano”
  • Muerte súbita en jóvenes. El papel de la autopsia molecular
  • Unidades hospitalarias para la prevención de la muerte súbita
  • Rol de la comunidad y asociaciones de familiares en la investigación y prevención de la muerte súbita
  • Espacios cardioprotegidos

En las exposiciones y debates se puso de manifiesto que la PCS/MSC es un problema de salud universal de origen multifactorial por lo que requiere de una estrategia global con abordaje multidisciplinar y colaboración internacional en la investigación. Por ello, se hace necesaria la participación de todos los actores implicados, sin olvidar a las familias, para abordar de forma integral su prevención y tratamiento: antes, durante y después del episodio de PCS.

Las conclusiones y retos que se elevan a las autoridades sanitarias y a la población en general de los diferentes países son las siguientes:

1-Registro de pacientes y adecuada certificación post-mortem de la MS. Es necesario disponer de un registro de pacientes que han sobrevivido a una PCS, adecuar los certificados médicos de defunción para que se puedan registrar adecuadamente los casos de MS y capacitar a los médicos para que se cumplimente de forma correcta los certificados. Todo ello con la finalidad de disponer de estadísticas propias de cada país sobre las que establecer las políticas y estrategias de salud en este campo.

2.Creación de las Unidades Hospitalarias de Cardiopatías Familiares donde se pueda realizar la evaluación clínica de los supervivientes de una PCS y de los familiares de fallecidos por MSC. Ello permitirá disponer de bases de datos para la investigación, educar y dar apoyo a las familias y facilitar el apoyo a las terapias a los pacientes en riesgo.

3.Disponibilidad de los medios actuales de diagnóstico por imagen y acceso al screening genético para la adecuada identificación de los pacientes en riesgo y descubrir nuevos mecanismos de enfermedad.

4.Nuevas estrategias en Patología Forense. Extender la obligación de la autopsia en todas las muertes súbitas, tanto en las PCS extrahospitalarias como hospitalarias, sobre todo en personas menores de 50 años. Adecuada formación de los médicos forenses en patología cardiovascular, disponer de las instalaciones y medios adecuados que permitan el diagnóstico de patologías cardiovasculares complejas. Acceso a los diagnósticos, historia clínica y pruebas complementarias de los fallecidos objeto de autopsia. Capacidad de contacto y ayuda a las familias de fallecidos por MS y facilidad para referir a los familiares de primer grado a las Unidades Hospitalarias de Cardiopatías Familiares.

5.Mejorar la resucitación cardio-pulmonar para obtener mayores tasas de supervivencia tras un PCS. Para ello se deben poner en marcha reformas legislativas con enseñanza obligatoria de las maniobras de soporte vital básico (SVB) como parte del currículo en la enseñanza secundaria, obligatoriedad de realizar cursos de SVB para la obtención de la licencia de circulación y extender los programas de SVB en la población general.

6.Implementar los espacios cardioprotegidos. Disponibilidad de desfibriladores externos automáticos (DEAs) en espacios públicos con alta afluencia de personas: escuelas, universidades, instalaciones deportivas, estaciones de trenes, aeropuertos, etc. Los DEAs deben estar registrados en un mapa, geolocalizados, accesibles las 24 h del día y enlazados con el sistema de emergencias médicas.

7.Impulsar la creación de asociaciones de familiares con el objetivo de que puedan asesorar y ayudar a las familias afectadas tanto psicológica como científicamente.

En el presente documento se presenta un resumen de las recomendaciones para un abordaje multidisciplinario de la Muerte Súbita Cardiaca (MSC) en base a las experiencias y material académico presentados en el Simposio Internacional de Muerte Súbita celebrado en Costa Rica en Setiembre del 2024.